En un esfuerzo por eliminar los prejuicios inconscientes contra los sospechosos penales, la Fiscalía del Condado de San Joaquín planea implementar por completo una política antes del viernes que excluya la raza de cualquier decisión relacionada con la presentación de cargos.
El fiscal de distrito Ron Freitas afirmó que su oficina será una de las primeras en el estado en adoptar el "enjuiciamiento ciego a la raza", tal como lo exige la Legislatura. Esta medida requiere que los fiscales hagan un esfuerzo adicional para excluir la raza al tomar una decisión sobre si se deben presentar cargos penales contra los sospechosos.
"Me enorgullece que no solo estemos cumpliendo con la ley; estamos estableciendo el estándar de justicia en California", dijo Freitas en un comunicado. "Al adoptar de forma temprana el enjuiciamiento ciego a la raza, nos aseguramos de que nuestro sistema de justicia funcione sin sesgos raciales. Me enorgullece que el Condado de San Joaquín esté liderando el camino, demostrando nuestro compromiso con la verdadera igualdad".
El enjuiciamiento ciego a la raza funciona redactando los identificadores raciales —como la raza de un posible acusado, así como su nombre y dirección— de los informes de delitos y otros documentos que serán revisados por los fiscales para decidir si se presentan cargos penales.
La norma entrará en vigor en 2025.
La oficina del Fiscal General de California, Rob Bonta, emitió directrices en enero para los fiscales de los condados sobre esta política.
"El sesgo inconsciente no tiene lugar en el sistema de justicia penal y no debe influir en la presentación de cargos", afirmó Bonta en ese momento.
La oficina de Bonta estableció un proceso de dos pasos para la presentación de cargos: uno con documentos redactados y otro basado en transcripciones originales.
El primer paso, diseñado para ser ciego a la raza, examina un caso inicial para determinar si merece cargos, aunque los cargos reales no se determinan en ese momento. Este paso debe ser realizado por personal que no esté asociado con la presentación de cargos o mediante automatización, como un programa de inteligencia artificial, para garantizar la imparcialidad racial.
El segundo paso, que es una revisión más rigurosa, analiza los documentos sin redacción e implica decidir qué cargos se deben presentar.
El fiscal de distrito del condado de Yolo fue pionero en la implementación del enjuiciamiento ciego a la raza en 2021, utilizando un programa informático diseñado para eliminar las referencias raciales en los documentos revisados por los fiscales.
El Laboratorio de Políticas Computacionales, compuesto por un equipo de investigadores de Harvard, Stanford y la Universidad de Nueva York, está empleando inteligencia artificial para escanear los documentos utilizados por los fiscales en las decisiones de presentación de cargos. El sistema está diseñado para redactar automáticamente referencias a la raza, descripciones físicas, nombres, direcciones, vecindarios u otras referencias que puedan conducir a estereotipos o suposiciones sobre la raza, y las reemplaza con referencias genéricas.
Las directrices de Bonta establecen que dichos programas se pueden utilizar siempre que "se implementen salvaguardas adecuadas para prevenir el acceso no autorizado a información sensible".
Esta historia original fue escrita por Chris Woodyard para Stocktonia.
